2021-08-12 04:29:02
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) expresó hoy miércoles su preocupación por la nueva práctica de Estados Unidos de trasladar en avión hacia el sur de México a personas no mexicanas solicitantes de asilo y migrantes en virtud de una orden de salud pública relacionada con la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19). “Las personas o las familias a bordo de esos vuelos que puedan tener necesidades urgentes de protección corren el riesgo de ser devueltas a los mismos peligros de los que han huido en sus países de origen en Centroamérica, sin ninguna oportunidad de que se evalúen y atiendan esas necesidades”, indicó el organismo en un comunicado. El llamado Título 42, impulsado en la administración de Donald Trump, permite a Estados Unidos devolver “inmediatamente” a adultos y familias migrantes que buscan asilo en la frontera sur, debido a la preocupación por la pandemia. La ACNUR consideró que la medida se realiza en un momento en el que el flujo de solicitantes de asilo y migrantes en la región “ha aumentado considerablemente”, y por tal razón, ahondó, estos vuelos de expulsión “también pondrán a prueba la ya sobrecargada capacidad de respuesta humanitaria en el sur de México y norte de Guatemala”. “Aumentarán el riesgo de transmisión de la COVID-19 a través de las fronteras nacionales y obstaculizarán las medidas que se están adoptando para compartir la responsabilidad entre los países de la región a la hora de abordar las causas profundas del desplazamiento forzado y de la migración”, alertó. El organismo de Naciones Unidas reiteró el llamado para que Estados Unidos “levante rápidamente las restricciones de asilo relacionadas con la salud pública del Título 42 que siguen en vigor, y restablezca el acceso al asilo para las personas cuyas vidas dependen de él”. Asimismo, dijo estar dispuesta a apoyar a Estados Unidos, a México y a todos los países en las acciones y medidas que salvaguardan efectivamente la salud pública, “sin sacrificar el derecho fundamental de cualquier persona que huye de la guerra, la violencia o la persecución, a tener acceso a un territorio seguro y a procedimientos de asilo humanos, con prontitud y sin obstrucción”. Finalmente, la ACNUR recordó que al margen de cualquier acuerdo oficial de traslado con las debidas garantías legales, la medida que se hace “contraviene el derecho internacional y los principios humanitarios” de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951. El gobierno estadounidense, si bien ha revertido algunas de las políticas implementadas en la pasada administración, reanudó el pasado 2 de agosto la deportación acelerada de determinadas unidades familiares (Expedited Removal), y señaló que continuará procesando a las personas de acuerdo con el Título 42 actualizado de los Centros para el Control de las Enfermedades.
